¿Empleado o falso autónomo? La importancia de clasificar correctamente a tu plantilla
En la era de la globalización, recurrir a una oferta internacional de empleados a tiempo completo y autónomos se ha convertido en algo habitual. Pero clasificar con precisión a estos trabajadores es fundamental. Las relaciones empresa-trabajador están sujetas a importantes normas, que difieren según se trate de empleados o autónomos. El incumplimiento de estas normas puede meter a las empresas en un aprieto, y casos recientes de gran repercusión -como el de Uber ante el Tribunal Supremo del Reino Unido por clasificar erróneamente a los conductores como falsos autónomos- ponen de manifiesto el riesgo de equivocarse. Están en juego cuantiosas multas, demandas y daños en la reputación.
Atlas organizó recientemente un webinar para responder a algunas de las principales preguntas que se plantean las empresas en relación con el cumplimiento de la normativa y la clasificación de los empleados. Anthony Smith y JoHannah Harrington, de Atlas, y Aravind Ganesan, de inDrive, compartieron sus conocimientos. Sigue leyendo para conocer los puntos de vista y los extractos del debate.
Antes de empezar: Ten en cuenta que la información de este seminario web no constituye asesoramiento jurídico; si tienes preguntas específicas sobre tu empresa, busca asesoramiento externo. O, si quieres saber más sobre cómo un Employer of Record (EOR) puede ayudar a tu empresa a seguir cumpliendo la normativa cuando opera internacionalmente, ponte en contacto con Atlas.
Utilizar a los autónomos en tu beneficio
En primer lugar, ¿por qué puede una empresa contratar a un autónomo en lugar de a un empleado? Aravind está acostumbrado a tomar estas decisiones desde su puesto de Senior RR.HH. Business Partner (APAC) en inDrive: "Lo más importante es que conozcamos la duración y el tipo de proyecto. Y el segundo punto será la flexibilidad y la escalabilidad". Y añade que el presupuesto no es un problema en esta fase.
Aravind explica cómo optar por autónomos puede dar a las empresas una ventaja en nuevos mercados, una práctica habitual en el sector del transporte por carretera. "En estos casos", explica, "siempre preferimos autónomos temporales. ¿Por qué? Porque cuando iniciamos nuestra actividad en [un] país, probablemente sabremos en un plazo de tres a seis meses si [va a ser] un éxito [...] No podemos perder el tiempo".
Elegir autónomos con el nivel de experiencia adecuado también es vital. "Si vamos a contratar a un autónomo, tenemos que entender que se trata de un compromiso a corto plazo [...], y debe ser alguien que tenga la experiencia adecuada y pueda trabajar con una supervisión mínima".
Al cabo de unos seis meses se sabrá si un proyecto ha tenido éxito. Si es así, inDrive empezará a estudiar la posibilidad de constituir una entidad jurídica, registrarse ante las autoridades locales, y demás.
¿Qué diferencia a un trabajador por cuenta ajena de un autónomo?
¿Cómo se define a un autónomo? JoHannah explica que las definiciones varían considerablemente de una jurisdicción a otra, lo que complica las cosas para las empresas internacionales. Incluso dentro de Estados Unidos, las normas pueden variar de un estado a otro.
En este punto, las "listas de control" pueden ser una herramienta útil. Algunos ejemplos de indicadores útiles son:
Autonomía: ¿Controla el individuo sus actividades y horarios diarios, o los dicta la empresa?
Exclusividad: ¿Puede la persona atender a varios clientes a la vez o sólo a una organización?
Estructura de pago: ¿Se paga al individuo un salario, una tarifa por hora o por día, o la remuneración está vinculada a los resultados?
Duración del contrato: ¿El contrato del trabajador abarca un tiempo indefinido o específico?
La independencia es el factor crítico aquí. Es menos probable que los autónomos tengan cargos, direcciones de correo electrónico de la empresa, responsabilidades de supervisión, equipos, etc. Por lo general, pueden trabajar para varios clientes, tienen flexibilidad en cuanto a dónde y cuándo realizan su trabajo y se les suele pagar por entrega o con una tarifa específica. La ausencia de prestaciones y de vacaciones también es típica de los autónomos, pero a cambio suelen recibir un salario más alto.
Riesgos jurídicos de clasificar erróneamente a falsos autónomos
Las repercusiones de clasificar erróneamente a los trabajadores pueden ser graves. "Se trata de todos los salarios atrasados de esas personas", explica JoHannah. "Es decir, todos los complementos que esas personas no recibieron porque no se les trató como empleados en la contabilidad. También habría que pagar todos los impuestos atrasados de esas personas y, muy probablemente, elevar su salario para que alcance el nivel necesario para la persona dependiente de esa jurisdicción. Podría haber algunas consideraciones de equidad y otras cuestiones que surgen en ese sentido".
"También hay sanciones a nivel gubernamental. Si has clasificado erróneamente a un individuo como empleado, también has dejado de pagar impuestos como empleador tanto para el empleado como para la empresa. No ha registrado su entidad en las jurisdicciones locales (si es que tiene una entidad en la jurisdicción). Por lo tanto, es probable que haya algún riesgo de establecimiento permanente, y también multas y sanciones asociadas a esa empresa en la propia jurisdicción".
Las cosas empeoran si se detectan patrones de clasificación errónea, ya que suelen dar lugar a demandas colectivas y a multas muy cuantiosas: "Esto ocurre cuando varios falsos autónomos de una organización se unen y presentan una demanda contra una empresa por clasificación errónea", explica JoHannah.
Qué hacer si te encuentras en riesgo de clasificación errónea
Para ilustrar la importancia de evitar la clasificación errónea de los empleados, JoHannah comparte dos casos recientes.
En primer lugar, detalla el enfoque proactivo de un cliente de Atlas. El cliente se dio cuenta de que varias personas que había contratado como falsos autónomos estaban siendo tratadas como empleados. Atlas actuó rápidamente. "Atlas, por supuesto, estaba más que dispuesta a ayudar". afirma JoHannah. "Comprendemos el riesgo y la preocupación de la clasificación errónea, tenemos nuestra propia lista de comprobación para asegurarnos de que no se produzca". Cuando utilizas un EOR como Atlas, asumimos toda la responsabilidad como empleador legal de los miembros de tu equipo en una jurisdicción para asegurarnos de que siempre cumples la normativa local.
Al tomar esta medida correctiva, la empresa evitó posibles multas, sanciones y demandas judiciales.
Qué ocurre cuando una empresa no lo hace bien
El otro ejemplo de JoHannah subraya las posibles repercusiones de no actuar con prudencia a la hora de clasificar a los trabajadores. "El ejemplo no tan positivo que tengo es el de Nike. Hace poco salió un artículo que sugería que Nike podría ser multada con más de 530 millones de dólares por clasificar erróneamente a miles de trabajadores [como falsos autónomos]".
Los trabajadores de Nike tenían equipos y títulos y sólo podían trabajar para Nike. Este desajuste con el estatus de autónomo podría acarrear importantes sanciones: "A lo que se enfrentan son multas de las autoridades fiscales. Multas reglamentarias por no pagar impuestos en nombre de estos individuos, y por no pagar impuestos al gobierno como empresa."
Cómo un Employer of Record (EOR) puede eliminar los riesgos de caer en los falsos autónomos
Tanto si operas a nivel internacional como si no, es fundamental que te asegures de clasificar correctamente a tus empleados. Nuestro seminario web puso de relieve los riesgos jurídicos y las consecuencias reales de una clasificación errónea, y cuantas más zonas geográficas abarque tu empresa, más compleja será la situación.
Pero esto no debe disuadir a tu empresa de explorar nuevos mercados y sacar el máximo partido de una reserva mundial de talento. Con la orientación de un Employer of Record como Atlas, las empresas pueden enfrentarse con confianza a los retos de una plantilla global sin dejar de cumplir la normativa referente a falsos autónomos.